lunes, 21 de enero de 2013

Elogio al infierno de una dama (poema)

Algunos perros que duermen a la noche
deben soñar con huesos
y yo recuerdo tus huesos
en la carne
o mejor
en ese vestido verde oscuro
y esos zapatos de taco alto
negros y brillantes,
siempre puteabas cuando
estabas borracha,
tu pelo se resbalaba de tu oreja
querías explotar
de lo que te atrapaba:
recuerdos podridos de un
pasado
podrido, y
al final
escapaste
muriendo,
dejándome con el
presente
podrido.
hace 28 años
que estás muerta
y sin embargo te recuerdo
mejor que a cualquiera
de las otras
fuiste la única
que comprendió
la futilidad del
arreglo con la vida.
las demás sólo estaban
incómodas con
segmentos triviales,                                   
criticaban
absurdamente
lo pequeñito:
Jane, te
asesinaron por saber
demasiado.
vaya un trago
por tus huesos
con los que
este viejo perro
sueña
todavía.


Autor: Charles Bukowski 

Extraído de: Charles Bukowski - Poemas

lunes, 14 de enero de 2013

El gladiador


No importa tu tamaño, edad o fuerza física, Si tu intelecto y forma de ver las cosas van más allá de lo establecido eso te convierte en el mas temible de los guerreros.

Oda al melón

 Oh tu, bello melón
con silueta tan redonda y sincera
captas mi vida entera
tu imagen me llena el corazón. 

Tu simetría es tan pura
como la inocencia de un niño
por eso quiero que mis hijos
sean como tú, noble fruta

Cuando pruebo tu dulce sabor
Siento que no me falta nada
Quisiera que siempre llenes mi mirada
Mi melón dulce, mi dulce amor.


Autor: Samuel Mercedes 

El fluido del saber


"La lectura no da al hombre sabiduría; le da conocimientos" - William Somerset Maugham

La seguridad de la noche


Todas las noches, la familia García se va a dormir sin preocupación alguna. El edificio donde viven esta igual que siempre, todo esta igual en las noches. Los mismos ruidos de los carros pasando por la calle y los ronquidos del vigilante siempre es un sueño profundo. Todo cambiará esa noche.

Los padres en su habitación, soñando con sus dulces angelitos que acaban de nacer y ahora están en la habitación de al lado. Seguros de todo peligro. El padre sueña que le pica la garganta pero es tan fuerte que abre los ojos pero lo que ve no es el abanico en el techo, solo una cara oscura y desconocida sobre él. El padre se queda paralizado bajo la mirada de aquel desconocido pero el hechizo se rompe cuando otra figura oscura entra rápidamente por la puerta. La mujer se levanta pero su mirada no dice nada cuando ve a las dos figuras en su cuarto. Sólo sus ojos se convierten en mares al ver el afilado cuchillo en el cuello de su marido.

La luz de la luna ayuda a detectar los movimientos de los hombres y la que estaba enfrente de la puerta toma de sorpresa a la mujer y la mantiene inmóvil con la ayuda de un cuchillo en su garganta. Lo único que pueden pensar los García es en la seguridad de sus gemelos y rogar que Dios los proteja.

El hombre que sujeta al padre se acerca a su oído.
-No les haremos daño, sólo queremos el dinero pero si se ponen difíciles ya vimos quienes están en la habitación de al lado- Le susurra y en ese momento tanto la mano de la mujer como la del hombre apuntaron al closet. Los asaltantes corren deprisa a desenterrar el tesoro que tanto deseaban. El padre se levanta de la cama con piernas aún temblando a ponerle la clave a la caja fuerte con la esperanza de que más rápido se vayan mejor. Ninguno de los dos hombres está mirado hacia atrás, sus ojos y cabezas están sólo en lo que tienen en frente.

Salen disparados fuera del cuarto y luego fuera del apartamento. La madre va inmediatamente al cuarto de sus hijos, llorando de la felicidad que nadie salió herido. El padre sigue a los asaltantes fuera del apartamento, no hace nada, sólo se queda parado viendo como las dos figuras se van encogiendo con la distancia y como van chocando con los autos encendiendo su alarma. El padre ve como las luces de los apartamentos comienzan a encenderse.
-Ladrón! Ladrón! – Muchos gritan pero nadie hace nada, solo se paran en sus balcones esperando al vigilante que está tirado sobre un charco de sangre.

Muchos minutos después llega la policía y la ambulancia. Nadie entiende como pudieron haber entrado ya que la puerta principal no está forzada. Le preguntan a todos comenzando con el servicio pero ella declara que no sabe nada, sólo que entraron a su cuarto bruscamente y la ataron para violarla pero nunca llegó tan lejos. Ella cuenta su historia con una voz monótona mientras se toca mucho las manos donde no hay rastros de haber sido atada. 

El ser escritor

Al enfrentarse al difícil mundo de la pantalla en blanco y batallar con las ganas de hacer pasar a la inspiración de su recóndito escondite a la punta de los dedos, muchos escritores noveles pierden la guerra antes de enfrentarse a su primera batalla. Y con mucha razón muchos se rinden, emprender esta peregrinación hacia el bien escribir no es decisión sencilla. La mayoría de estos autores coinciden en dos pasos fundamentales para convertirse en escritor: leer y observar.

Sería tentador pensar también que el talento es también un paso a seguir, pero como algunos de ellos sugieren, con el talento se nace. Ahora, ¿por qué leer? Como dice el dramaturgo francobelga Francis de Croisset  “La lectura es el viaje para los que no pueden tomar el tren”. Leer nos lleva a lugares donde no hemos estado, en tiempos que no hemos presenciado, hacia vidas que aún no hemos vivido.
El ser escritor no inicia en el momento en que se comienza a redactar la historia, se origina en el mismo momento en que se decide abrir los ojos de escritor. El ser humano promedio camina por la vida sin detenerse a observar lo que sucede a su alrededor; es la capacidad, y diría que más aún el deber, del escritor observar lo que le rodea. Allí encontrará la fuente de la famosa inspiración que muchos buscan, y verá que los personajes de las más grandes historias caminan al lado nuestro, esperando a ser vistos. 

martes, 8 de enero de 2013